Esta intervención terapéutica se desarrolla con adolescentes de entre 14 y 18 años que tienen medidas judiciales por violencia doméstica.
Desarrollado por el Instituto de Reintegración Social de Bizkaia (IRSE), trata de eliminar los comportamientos violentos de los adolescentes a través de un programa grupal (6 menores) compuesto por 17 sesiones de hora y media de duración.
Esta intervención establece una serie de objetivos específicos a perseguir para la finalización de la conducta violenta que incluyen:
Para la consecución de estos objetivos, esta intervención se estructura en 3 fases la primera de las cuales se orienta a la observación y a la recogida de datos, para pasar a continuación a la intervención propiamente dicha y una vez finalizada ésta el tratamiento contempla una fase de seguimiento.
A continuación, se detallan la estructura y los contenidos de cada fase:
Tal y como se puede observar la toma de contacto con los adolescentes y la evaluación de la violencia familiar se desarrolla en 3 sesiones de carácter individual. Tras estas sesiones el programa de intervención consta de 10 sesiones grupales en las que se trabajan los objetivos generales y específicos del tratamiento. Durante estas sesiones se trabaja con dinámicas, momentos de información y reflexión, entregándose tareas para casa que serán revisadas en la siguiente sesión. Esta intervención finaliza con un periodo de 4 sesiones de seguimiento, aunque no se especifica la periodicidad de las mismas. Las tres primeras sesiones de seguimiento se desarrollan por separado con el adolescente y sus familiares con el fin de evaluar el estado de la convivencia, mientras que la última sesión se realiza en conjunto con los diferentes miembros de la unidad familiar y se sigue del cierre de la intervención.