En este caso la respuesta educativa tiene como objetivo ayudar a aprender de la experiencia, dando la oportunidad al niño o adolescente para intentar comprender su propia conducta, ponerla en relación con el contexto en que se produce y con sus sentimientos y estado de ánimo. Adicionalmente, ayuda a explorar otras posibilidades de respuesta de comportamiento ante esas situaciones o emociones, abriendo alternativas para reaccionar de modo más adaptativo en futuras ocasiones.
Se insiste en que asuma la responsabilidad sobre sus acciones y tome decisiones sobre su forma de actuar. Se basa en el diálogo centrado en el análisis de la experiencia y de los problemas de convivencia y dificultades que experimentan los niños y adolescentes.
Elvira, L., (coord.), et al., Salud mental de menores en acogimiento residencial. Guía para la prevención e intervención en hogares y centros de protección de la Comunidad Autónoma de Extremadura. Badajoz, Junta de Extremadura, 2011, 240 p.